Tu vida es el resultado de tus hábitos

Uno de los autores incluidos dentro del libro Aprendiendo de los mejores (Alienta, 2013) es Jack Canfield(@jackcanfield) que además de participar en la exitosa película-documental de El Secreto, es autor del libro Los principios del éxito y co-autor de El poder de mantenerse enfocado, y que aparece una de sus intervenciones en el post 10 vídeos para aprender de los mejores.

Una de las diez reflexiones de Jack Canfield incorporadas al libro dice lo siguiente:

«Defendemos nuestros malos hábitos como beber o fumar con lógica indefendible e ignoramos los consejos útiles, dejamos de aprender nuevas habilidades, desperdiciamos el tiempo en los aspectos triviales de la vida, nos entretenemos en conversaciones inútiles, comemos alimentos poco saludables, no practicamos ningún ejercicio, gastamos más dinero del que ganamos, no invertimos en nuestro futuro, evitamos conflictos necesarios, nos abstenemos de decir la verdad, no pedimos lo que queremos, y luego nos preguntamos por qué nuestras vidas no funcionan».
¿Qué significa esta frase? Qué todo es un resultado:

– Tu salud es un resultado... el resultado de cómo cuidas tu cuerpo: nutrición, sueño, ejercicio.
– Tu dinero es un resultado... el resultado de cómo manejas tus finanzas personales.
– Tus relaciones son un resultado... el resultado de lo bien o lo mal que las mimas.
– Tu vida profesional es un resultado... el resultado de tu desarrollo personal.

En definitiva, que nada sucede por casualidad y que vivimos en un mundo de causas y efectos: Si haces unas cosas consigues ciertas cosas y si haces otras cosas consigues otras cosas. La gente con mentalidad ganadora habla siempre de causas-efectos; la gente con mentalidad perdedora recurre a la buena (mala) suerte.

Si tu vida no marcha como te gustaría en alguna parcela –salud, dinero, relaciones...– probablemente es porque hay algo que no estás haciendo bien y tienes que cambiar ciertos hábitos. Los resultados no mienten.

Todo resultado responde a una causa; y la cuestión es saber cuál es esa causa –tomar Conciencia– porque entonces se puede iniciar un proceso de cambio. Los procesos de aprendizaje y cambio funcionan de la siguiente manera según 4 pasos:

1. Inconsciente Incompetente (II): No sé que no sé.
Dice Louise Hay (@louisehay) que «la conciencia es el único camino hacia la sanación y la curación». Es muy difícil que cualquier cambio tenga lugar desde la no–Conciencia. La Conciencia es aquel estado que permite saber por qué ocurren las cosas. Es un estadio superior que permite entender el juego de por qué las cosas son como son. Tomar Conciencia no es otra cosa que despertar a la vida, comprender su profundo significado. Por eso, a mayor Conciencia, mejores decisiones, mejores comportamientos, mejor todo. La Conciencia nos dice qué merece y qué no merece la pena. La Conciencia nos libera; su ausencia nos esclaviza, porque somosInconscientemente Incompententes: no sabemos que no sabemos.

2. Consciente Incompetente (CI): Sé que no sé.
Una vez que despiertas, que abres los ojos, ya eres Conscientemente Incompetente: Sabes que no sabes. Y a partir de ahí, se puede iniciar el aprendizaje y la formación. Y a la hora de formarse es importante la Teoría, porque acelera enormemente la Práctica, pero también hay que saltar al ruedo. No se puede aprender a montar en bicicleta leyendo un libro. Igual pasa con todo.

3. Consciente Competente (CC): Sé que sé.
A medida que la Formación es mayor uno se va volviendo Conscientemente Conmpetente: Sabe que sabe. Cuanto más estudias, cuanto más experimentas, cuanto más lees, cuanto más contrastas, más claras se van teniendo las ideas y más seguridad en uno mismo. Uno empieza a tomar perspectiva y ver las cosas con más claridad.

4. Inconsciente Competente (IC): Soy lo que sé. 
Es la última y pata más importante: la interiorización, que aquello que deseamos pasa a formar parte de uno, se convierte en hábito; es decir en Inconscientemente Competente: Soy lo que sé. Un hábito no es otra cosa que un comportamiento interiorizado que hacemos con naturalidad. ¿Y cómo se construye un Hábito? Por repetición. ¿Y qué hay que hacer para repetir la misma cosa una y otra vez? Disciplina. De de ello ya hablamos en el post Personas gaseosa y en 7 hábitos para el éxito. Allí decíamos que los procesos de desarrollo personal funcionan de la siguiente manera:

1. Éxito = Hábitos.
2. Hábitos = Repetición.
3. Repetición = Disciplina.

La motivación te anima a ponerte en marcha, pero son los hábitos esculpidos gracias a la disciplina del día a día los que nos permiten llegar donde queremos. Por tanto, la Disciplina es la pata más importante de la ecuación del éxito, porque Disciplina no es otra cosa que hacer lo que se tiene que hacer aunque no apetezca. Jim Rohn siempre decía: «La gente no consigue resultados porque prefiere hacer lo cómodo a lo necesario»; algo parecido a lo que afirmaba Víctor Hugo: «A nadie le faltan fuerzas, lo que a mucha gente le falta es voluntad».

Tu vida no cambia por lo que escuches en una charla inspiradora, sino por lo que hagas día tras día con lo que escuches en la charla inspiradora. La inspiración enciende la mecha del cambio; los hábitos convierten la inspiración en resultados a través de la Disciplina.

Y hay que decir, como comentaba recientemente en el programa de radio Pulso Empresarial [minutos 11 a 24] que la Disciplina es un concepto asociado al medio y largo plazo. No se trata de ir a clases de chino (o de cocina o al gimnasio), las tres primeras semanas, sino de ser constantes a lo largo del tiempo y no desistir tras las primeras semanas de euforia y ganas de comerse el mundo. En Aprendiendo de los mejores, el experto Brian Tracy (@briantracy) dice: «Todo el mundo hace cosas que hace la gente de éxito, la diferencia es que la gente de éxito hace esas cosas todo el tiempo».

* Hoy te dejo el artículo 7 recomendaciones para comenzar tu camino como emprendedor, una reseña-post de «Aprendiendo de los mejores» escrita por Noemí Vico (@_tiruriru_) en la web Implantando Marketing.


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por tu visita.